Las farmacias comunitarias son establecimientos sanitarios idóneos para realizar estrategias de intervención en la comunidad, por su accesibilidad, cercanía y confianza.
El farmacéutico comunitario es un agente de gran importancia para lograr prevenir el consumo de bebidas alcohólicas en los menores de 18 años debido, por sus conocimientos en salud pública y medicamentos.
Además, desde la farmacia comunitaria: